Hace unos días una noticia llego con indignación, cuando el sector automovilístico alemán volvió a verse envuelto en el escándalo después de que al parecer, las automotrices alemanas habían experimentado con monos y seres humanos, buscando demostrar que las emisiones de los motores diésel no son tan dañinas para la salud como habitualmente se cree.
Si bien la naturaleza de estas pruebas puede no ser extraordinaria o ilegal, la respuesta pública ha sido de indignación.
Según informes de los periódicos alemanes Stuttgarter Zeitung y Süddeutsche Zeitung, los experimentos se centraron en la inhalación de dióxido de nitrógeno a corto plazo por personas sanas, según informaron los periódicos.
Un hospital universitario con sede en Aquisgrán, examinó luego a unas 25 personas después de que estas inhalaron cantidades variables de gas durante varias horas.
Se informaron después de las últimas revelaciones, que los experimentos del mismo método en pruebas también inaceptables, se aplicaron con la inhalación de gas tóxico a monos de laboratorio.
Los fabricantes de automóviles hicieron un análisis de su interés por el uso de la tecnología moderna, para que las emisiones de diésel fueran más o menos inofensivas, añaden los informes de los fabricantes.
Por este escándalo, Volkswagen suspendió al cabildero principal Thomas Steg a principios de esta semana, indicando que por estas razones y los otros fabricantes de automóviles Alemanes han seguido su ejemplo con la esperanza de calmar la ira del público.
Tanto Daimler AG y el grupo BMW suspendieron o trasladaron a varios empleados vinculados a este grupo que se encargó de investigaciones que involucraban la exposición de monos y humanos a gases potencialmente dañinos. Ninguna de las empresas confirmó los nombres de los empleados.
Los fabricantes de automóviles tampoco han guardado silencio al respecto. Los altos ejecutivos han llamado a la investigación repugnante, sugiriendo que la ética empleada por el Grupo Europeo de Investigación en Medio Ambiente y Salud en el Sector del Transporte (EUGT) era inaceptable.
BMW dijo que eliminará a su representante en el consejo de administración de EUGT de sus funciones actuales, en espera de una investigación sobre la investigación de EUGT por parte del equipo legal del fabricante de automóviles.
Daimler afirmó que suspendería al menos a un empleado vinculado al escándalo, mientras que un bufete de abogados contratado externamente investiga las pruebas relacionadas con el diésel.
Mientras tanto, los fiscales alemanes allanaron las casas de varios miembros del personal de Audi, tanto actuales como anteriores, en relación con el escándalo de emisiones de emisiones del Grupo Volkswagen,
Estas visitas oficiales de los fiscales, tuvieron lugar el miércoles aproximadamente al mismo tiempo que la fiscalía de Stuttgart dijo que dos empleados de Robert Bosch estaban siendo investigados bajo sospecha de fraude.
Bosch, uno de los principales proveedores de autopartes, ha sido acusado previamente de crear el software que permitió a Volkswagen evitar las normativas y las pruebas de emisiones de diésel.
El proveedores de autopartes, ha apoyado las investigaciones en curso, cooperando plenamente con las autoridades responsables.
Por ahora ningún organismo de defensa de los animales se ha proclamado al respecto, ya que es muy probable que los presidentes de estas organizaciones sin «fines de lucro» y que ganan sueldos astronómicos, conduzcan autos alemanes, y que se verán obligados a cambiarlos ante las presiones de sus donantes.
Por la parte de los humanos, y es mi opinión, no seria mejor hacerles esta pruebas a presos con cadena perpetua, en ves de voluntarios que le pagan unos pesos para poder sobrevivir. No hay leyes para evitar estas pruebas ?
Mientras tanto de este lado del Atlántico, un caso que se relaciona con las emisiones, apunta a descubrir si Fiat Chrysler usó un software oculto, para permitir emisiones excesivas de diésel en las versiones diésel de 3.0 litros del Jeep Grand Cherokee y Ram 1500. La investigación sigue en curso.
Por Enrique Kogan.