Aunque algunos utilizan el término «automóvil volador» para referirse a todo tipo de aeronaves de despegue y aterrizaje vertical, como el Cadillac eVTOL y el Uber Elevate, nosotros los clasificaríamos como helicóptero personal y taxi aéreo, respectivamente.
Para esta lista, nos hemos centrado en los autos voladores reales, es decir, aeronaves capaces de circular por la calle y volar por el aire.
Muchas empresas han intentado fabricarlos a lo largo de los años, pero solo unas pocas tienen planes de llevarlos a la producción.
He aquí cinco de los ejemplos más prometedores.
1. Alef Automotive Model A
Alef ha sido noticia recientemente al recibir un certificado especial de aeronavegabilidad de la Administración Federal de Aviación (FAA) para probar su aeronave Modelo A apta para circular por los cielos de California.
No es el primero de su clase en obtener tal aprobación, pero Alef dice que es el primer prototipo de auto volador aprobado por la FAA que (a) encaja en nuestra infraestructura actual de carriles de circulación y plazas de aparcamiento, (b) despega y aterriza verticalmente, sin necesidad de una pista de aterrizaje, y (c) lo hace todo solo con la energía de la batería. También se parece vagamente a un automóvil, en el sentido amplio de la palabra.
El Modelo A aún necesita la aprobación de la NHTSA antes de poder circular por carreteras públicas, donde tendrá una autonomía de 200 millas y alcanzará una velocidad máxima de 25 mph, suponiendo que los conductores utilizarán las vías aéreas para la mayoría de los viajes.
Los interesados que dispongan de 300.000 dólares pueden hacer un depósito reembolsable de 150 dólares para reservar su plaza en la cola de pedidos o pagar 1.500 dólares para saltársela. Si todo va según lo previsto, el Alef empezará a entregarse a finales del 2025.
2. Aska A5
Una semana después de conceder la certificación a Alef, la FAA hizo lo mismo con Aska, cuyo A5 eVTOL de cuatro plazas funciona con una cadena cinemática híbrida formada por seis motores eléctricos alimentados por baterías y un motor de gasolina de autonomía extendida.
A diferencia del Alef Model A, el Aska A5 no trata de ocultar lo que es. En la carretera, donde ya ha recorrido más de 500 km, el vehículo ocupa tanto espacio como un Ford F-350 y es algo digno de ver, con sus enormes alas cargadas de hélices plegadas sobre la cabina.
Quienes hagan un depósito de 5.000 dólares por el A5 de 789.000 dólares recibirán algunas ventajas, como una acción opcional de la empresa, formación para obtener la licencia de piloto, una placa personalizada y un diseño a medida para su A5. Aska espera sacar el modelo al mercado en el 2026.
3. Auto aéreo Klein Vision
Hace tiempo que no sabemos nada de Klein Vision, con sede en Eslovaquia, pero los representantes de la empresa nos aseguran que el AirCar sigue en marcha y se dirige a nuestras costas. No sabemos cuándo llegará, sobre todo si tenemos en cuenta que Klein aún no ha obtenido la aprobación de la FAA ni de la NHTSA.
Klein está trabajando en Europa, donde ha completado más de 100 horas de pruebas de vuelo, incluido un vuelo interurbano en Eslovaquia. Para pilotar el AirCar se necesita una licencia de piloto y una pista de aterrizaje. Una vez en tierra, la máquina tarda unos tres minutos en pasar al modo de conducción.
Las alas se pliegan en el cuerpo con un movimiento hacia arriba y hacia atrás, y la cola se repliega. Cuando empiece a venderse en Europa (dentro de un año), el AirCar costará entre 550.000 y 1,1 millones de dólares.
4. Pal-V Liberty
Los dos últimos vehículos de nuestra lista son de tres ruedas, lo que técnicamente los convierte más en motocicletas que en autos, pero tienen volante y cabina cerrada, por lo que creemos que merecen una mención.
Creado por la empresa holandesa Pal-V, el Liberty es una máquina voladora para dos personas propulsada por gas que exige a sus propietarios una licencia de piloto de autogiro, así como acceso a una pista de aterrizaje.
Al igual que el Aska A5, las partes voladoras se apilan sobre el habitáculo cuando el vehículo funciona como auto. A diferencia del A5, el conductor/piloto debe extender manualmente varios elementos del tren de vuelo para poder volar. En tierra, donde se está probando actualmente, puede alcanzar una velocidad máxima de 99 mph.
La empresa comenzará la producción con 90 modelos Liberty Pioneer, cada uno de ellos a un precio de 599.000 dólares antes de impuestos. Si puedes esperar un poco y vivir sin los materiales de alta calidad del interior del Pioneer y los colores de pintura exclusivos, ahorrarás 200.000 dólares si optas por el Liberty Sport.
Pal-V tiene previsto entregar el primer ejemplar el año que viene, aunque a alguien en Europa. Aún no se sabe nada de su homologación en EE.UU.
5. Samson Sky Switchblade
Este biplaza en forma de cuña coloca sus alas por debajo de la cabina (como muchos aviones) y se transforma de máquina voladora a ciclo automático en menos de tres minutos.
Samson Sky tiene permiso de la FAA para empezar a probar su aeronavegabilidad, y nos dicen que la producción empezará 22 meses después del primer vuelo oficial (es decir, publicitado) del Switchblade, que la empresa aún no ha reclamado.
Para acortar el camino hasta la producción, se trata de un vehículo en kit, que se enfrenta a menos obstáculos normativos que una máquina construida por un fabricante. Eso significa, sin embargo, que los propietarios deben ensamblar ellos mismos el 51% del Switchblade.
Afortunadamente, Samson Sky tiene previsto guiarte a lo largo del proceso en uno de sus centros de construcción, cuando se creen. Esta guía en persona está incluida en el precio base de 170.000 dólares del triciclo volador.