Lo que más de moda está en el mercado automovilístico son los SUV y los todoterrenos.
De hecho, han dejado de ser una moda para ser considerados todo una tendencia. Todas (o casi todas) las marcas apuestan por tener uno en su catálogo.
Pero detrás de ese aspecto de todoterreno se esconde, en la mayoría de los casos, un monovolumen. Un auto alto, cómodo y espacioso para toda la familia.
Es fácil confundir a uno de estos SUV con un todoterreno de verdad, ya que muchos tienen la capacidad de equipar una tracción a las cuatro ruedas.
Una vieja marca de camionetas y vehículos todoterreno, resucitará en América del Norte
Los todoterrenos consumen más combustible
Cualquier tipo de tracción total siempre va a exigir un consumo de carburante más elevado al propulsor del vehículo. Sea cual sea el caso, comparado con un vehículo de tracción delantera o de propulsión trasera, utilizan un mayor número de componentes mecánicos.
Esto implica que el motor va a tener que cargar con un peso más grande, lo que a la postre se traduce en un consumo de combustible superior (unos 0,5 l/100km de media).
No obstante, la diferencia es cada vez más reducida gracias a la tecnología y a la electrónica utilizada, así como a los avanzados componentes.