¿Quién no se ha desgañitado cantando mientras conducía “Mamaaaa, uh, uh, uh, uh…”? Cualquier fragmento de Bohemian Rhapsody es bueno para liberarse, deshacerse de las tensiones y disfrutar del placer de viajar.
Ahora ya sabemos que no estamos solos cantando al volante, según una encuesta de SEAT UK.
Happy: el 90% de los conductores afirma que escuchar música en el coche les genera una sensación de felicidad. De hecho, una amplia mayoría de ellos (84%) disfruta de sus canciones favoritas en su vehículo siempre o muy a menudo. Así lo revela una encuesta de SEAT UK elaborada entre 2.000 conductores de entre 18 y 84 años.
La percepción de estos conductores está respaldada por una investigación publicada en la revista Nature que demuestra que escuchar música libera dopamina, la hormona de la felicidad. Además, el placer aumenta cuando se trata de una canción que nos gusta.
En este sentido, la automotriz española SEAT es la primera marca del mundo en integrar Shazam en sus autos. Según la consultora Nielsen, el 70% de los usuarios utilizan esta aplicación a más de 30 km/h. Es decir, mientras están en un vehículo en movimiento.
We will rock you: Y aunque sobre gustos no hay nada escrito, los participantes también eligen géneros: pop y rock son los preferidos. Un 64% asegura que escuchar diferentes tipos de canciones cambia su estado de ánimo.
Ante este vínculo entre música y conducción, es imprescindible que los sistemas de audio de la actualidad suenen como una orquesta. En la calidad del sonido influyen numerosos aspectos, desde la ubicación de los altavoces hasta la geometría del habitáculo del coche y, por supuesto, el movimiento. “Nuestro objetivo final es conseguir el sonido más natural posible”, apunta Adrián Mateo, ingeniero de Acústica Car Audio de SEAT.
Bohemian Rhapsody: Cualquier fragmento del éxito de Queen es un claro ejemplo del efecto que produce la música en los conductores. Bohemian Rhapsody, de 1975, es la primera de la lista de las 20 mejores canciones para viajar en coche, elaborada a partir de las respuestas de los participantes en la encuesta de SEAT UK.
El Top 10 está lleno de imprescindibles. Segundo puesto para otro éxito setentero, Dancing Queen, de Abba, que da paso a Livin’ on a Prayer, de Bon Jovi, y otros de la década de los 80 como Walking on Sunshine o Eye of the Tiger.
I Gotta Feeling: Los únicos artistas actuales capaces de colarse en los primeros diez puestos son Pharrell, con Happy, y Black Eyed Peas, con I Gotta Feeling. A partir del 11, sí abundan las canciones modernas, como This Is Me, de la película El Gran Showman, o Roar, de Katy Perry.
También en entre los puestos 11 y 20 se sitúan el hit más antiguo, Ain’t No Mountain High Enough (1966), y el único de la década de los 90, Wonderwall, de Oasis.
El top 20
1. Bohemian Rhapsody, Queen
2. Dancing Queen, ABBA
3. Livin’ on a Prayer, Bon Jovi
4. I’m Gonna Be (500 miles), The Proclaimers
5. Eye of the Tiger, Survivor
6. Walking on Sunshine, Katrina and the Waves
7. Wake Me Up Before You Go Go, Wham!
8. Happy, Pharrell
9. Girls Just Wanna Have Fun, Cindy Lauper
10. I Gotta Feeling, Black Eyed Peas
11. Ain’t No Mountain High Enough, Marvin Gaye & Tammi Terrell
12. Don’t Stop Believing, Journey
13. Wonderwall, Oasis
14. This Is Me, El Gran Showman
15. Roar, Katy Perry
16. Hey Ya!, Outkast
17. I Believe in a Thing Called Love, The Darkness
18. Three Little Birds, Bob Marley
19. One Kiss, Calvin Harris & Dua Lipa
20. Hey Baby!, DJ Otzi
… y cinco cosas que las convierten en un hit (según Pablo Cano, músico, productor y compositor de más de 500 producciones)
Ritmo. Los compases de 2/4 o 4/4 son fácilmente identificables y bailables, son tan familiares como el pulso de nuestro corazón.
Armonía. Las tonalidades mayores (do mayor, re mayor…) aportan una sensación de “vitalidad y alegría”. Además, en la música también se aplica la máxima de que menos es más: “Muchas canciones de éxito solo cuentan con 3 o 4 acordes”.
Estructura. Debe ser lógica para quien escucha, para que pueda anticipar qué parte va a venir según el estilo de la canción.
Letra. Es, en general, sencilla, “de modo que cualquier persona pueda entender el mensaje y sentirse identificada”. El objetivo es generar empatía.
Estribillo. “Es fundamental que tenga una melodía sencilla y cantable”. Es lo que el oyente va a recordar, por eso el factor de repetición es muy importante.