El 2 de diciembre, el piloto Romain Dumas estableció un nuevo récord mundial en la cima de la cresta oeste del volcán Ojos del Salado en Chile, pilotando un Porsche 911 significativamente modificado que funcionaba con eFuels.
Contó con el apoyo de un equipo internacional formado por miembros de Chile, Francia, Alemania, Estados Unidos, Canadá y Suiza.
El equipo que apoyaba al tres veces campeón de Le Mans, Romain Dumas, se enfrentó a condiciones extremas. El aire en altitud era sólo la mitad de denso que al nivel del mar, mientras que las temperaturas rondaban los 20 grados bajo cero.
“Nunca olvidaré esta experiencia. Fue una sensación extraordinaria conducir donde ningún automóvil había llegado antes”, dijo Romain Dumas poco después de descender del volcán.
“El 911 logró llegar más alto que cualquier otro vehículo terrestre de la historia. Llegamos a un punto donde nos encontramos con la verdadera cumbre de la cresta oeste; no podíamos subir más. Entonces esta fue realmente la altitud máxima que se puede alcanzar.
Es un momento de orgullo para todo el equipo y estamos agradecidos por el apoyo y la confianza de todos nuestros socios, cada uno de los cuales hizo esto posible”.
La expedición, que utilizó dos modelos Porsche 911 significativamente modificados, contó con el apoyo de HIF Global, Schaeffler Group, Mobil 1, BFGoodrich y TAG Heuer.
Estas empresas apoyaron al equipo internacional de guías, ingenieros, conductores y alpinistas con experiencia y tecnología.
«Felicitaciones a todo el equipo: un logro notable e inspirador», dijo el Dr. Frank Walliser, vicepresidente de Arquitectura y Características Completas del Vehículo de Porsche AG.
“Este proyecto comenzó como un ‘qué pasaría si’ y estoy muy orgulloso de trabajar para una empresa que realmente cree en superar los límites y aprender explorando.
Los dos modelos 911 que se utilizaron en esta expedición estaban propulsados por eFuels, que se producen en el piloto HIF planificado «Haru Oni en Punta Arenas, que fue iniciado por nosotros, y luego se mezclan según las regulaciones de combustible actualmente aplicables».
«Estamos entusiasmados con este resultado y por haber sido parte de este equipo cercano y apasionado que trabaja en un proyecto tan especial», dijo Clara Bowman, directora de operaciones de HIF Global.
“Esta es una demostración enfática de la capacidad de los eFuels sintéticos de HIF Global, funcionando en las condiciones más extremas y exigentes imaginables. Establecer un nuevo récord después de tanto tiempo es un logro increíble”.
El proyecto supuso el regreso del coche y el equipo al volcán Ojos del Salado, que lo visitó en 2022 y apenas superó los 6.000 metros en un recorrido exploratorio.
A modo de contexto, la altitud máxima alcanzada equivale a 1.934 metros más allá de la cima del Mont Blanc. El récord anterior, establecido en 2020, alcanzó los 6.694 metros.
Detalles de fondo: Los autos
En el intento de batir el récord participaron dos modelos Porsche 911 modificados, apodados “Doris” y “Edith”. El récord lo consiguió Dumas con la variante “Edith”, más ligera y ágil.
Esta transformación especial con capacidad todoterreno está basada en el actual 911 Carrera 4S. El motor bóxer de seis cilindros y 3,0 litros de 443 CV se mantuvo en su forma original y se combinó con la transmisión manual de siete velocidades estándar.
El automóvil funcionaba con lubricantes de fábrica de Mobil 1, lo que permitía que el tren motriz funcionara sin problemas incluso en un clima extremadamente frío.
El 911 demostró ser una base excelente; a través de la combinación de una construcción de chasis robusta pero liviana, amplia potencia y la capacidad de afrontar bien altitudes extremadamente altas.
Los dos coches estaban equipados con asientos de fibra de carbono y arneses de cinco puntos. A continuación, se agregaron ejes pórtico para aumentar la distancia al suelo (ahora 13,7 pulgadas/350 mm).
Los ejes pórtico también tuvieron el efecto de reducir las relaciones de transmisión, permitiendo movimientos suaves y precisos del acelerador a baja velocidad. Además, los coches estaban equipados con una protección especial en los bajos de fibra de aramida, ligera pero extremadamente resistente, para permitir el deslizamiento sobre rocas.
El coche principal recibió una tecnología adicional muy especial: dirección por cable, desarrollada y proporcionada por el Grupo Schaeffler.
El sistema llamado Space Drive fue capaz de satisfacer las demandas extremas y únicas del volcán y el terreno, ofreciendo precisión y retroalimentación detallada para permitir a Romain Dumas colocar el automóvil precisamente donde lo necesitaba, a menudo mientras ascendía pendientes precarias y casi verticales.