Haciendo pruebas en lagos congelados, en desiertos abrasadores o utilizando simuladores de conducción de última generación… los equipos de ingeniería de Ford han trabajado en todo el mundo para desarrollar un Mustang Mach E totalmente eléctrico que ofrece una verdadera experiencia de conducción Mustang a los clientes de todo el mundo.
Y cuando se trata de saber exactamente qué es lo que pone en altera el pulso de los conductores europeos, o les ayuda a relajarse, nadie entiende mejor a los usuarios del Viejo Continente que el equipo de las instalaciones de pruebas de Ford en Lommel, Bélgica.
Aquí, las características únicas de la suspensión, la dirección, el motor e incluso la tecnología de asistencia al conductor se combinaron para crear un Mustang Mach-E que cumple con las expectativas de los conductores europeos con el primer vehículo construido por Ford concebido como modelo totalmente eléctrico.
«Con la tecnología actual podemos adaptar un vehículo en el mundo virtual, de manera que nuestros primeros prototipos van encaminados a ofrecer el carácter adecuado; sin embargo, ese último 10 por ciento crítico sólo puede definirse en la carretera», cuenta Geert Van Noyen, gerente de dinámica de vehículos de Ford Europa.
«La plataforma totalmente eléctrica del Mustang Mach-E nos permite adaptar la excelente experiencia de conducción al volante a la carretera de montaña Trollstigen en Noruega, la autobahn alemana o las carreteras secundarias británicas”.
La clave del carácter intrínsecamente deportivo del Mustang Mach-E son los motores eléctricos de respuesta que accionan las ruedas y una batería bajo el suelo que hace posible un centro de gravedad bajo.
Utilizando los 100 km de pistas de pruebas de las instalaciones de pruebas de Lommel -que recrean superficies de carreteras desde el pavimento belga hasta los adoquines franceses, y presentan réplicas de superficies de carreteras de países como el Reino Unido, Alemania y España, los ingenieros de Ford incorporaron un característico toque europeo
Las carreteras típicamente más estrechas y reviradas de Europa, con límites de velocidad más altos que en otras regiones, requieren respuestas únicas de la dirección conectada y segura del Mustang Mach-E, apoyada por ajustes especialmente seleccionados para los amortiguadores y barras antivuelco del sistema de suspensión.
Incluso los neumáticos se han elegido especialmente para ofrecer el equilibrio ideal de agarre y confort de conducción en la amplia variedad de superficies de carreteras y condiciones climáticas del continente europeo.
Una conducción suave y estable es esencial para las altas velocidades que se encuentran en las autopistas europeas.
La evaluación de las características de crucero a alta velocidad del modelo totalmente eléctrico se llevó a cabo en las autopistas alemanas y en el circuito inclinado de 220 km/h y 4,2 km de las instalaciones de Lommel.
«El uso de energía eléctrica pura significa que el interior del Mustang Mach-E es muy silencioso, y eso hace que sea aún más importante evitar que el ruido y las vibraciones no deseadas lleguen al interior», cuenta van Noyen.
Las tecnologías de asistencia al conductor, como el Control de Crucero Adaptativo con Stop & Go, el Reconocimiento de Señales de Velocidad y el Centrado de Carril, son capaces de interpretar las señales de tráfico y las marcas de los carriles en todo el continente, para garantizar que los conductores se beneficien de la misma experiencia de conducción intuitiva y sin estrés, independientemente de donde vivan, trabajen o estén de vacaciones.
Además, la entrega inmediata de energía eléctrica proporciona las respuestas deportivas favoritas de los conductores europeos.
El sistema de tracción a las cuatro ruedas del Mustang Mach-E aplica el par de forma independiente a las ruedas delanteras y a las traseras para mejorar la aceleración y la conducción.
Los ingenieros de Ford probaron rigurosamente el sistema para asegurarse de que ofrezca la quintaesencia de la tracción trasera del Mustang en condiciones meteorológicas que van desde la nieve escandinava hasta el verano español.
Y la capacidad de ajustar la experiencia de manejo del Mustang Mach-E no sólo está en las manos de los ingenieros de Ford. Los conductores pueden elegir entre los modos de conducción Whisper, Active y Untamed.
Cada modo ofrece ajustes únicos para la dirección, el pedal del acelerador y la sensación de desaceleración, la iluminación ambiental e incluso los sonidos del vehículo para adaptar la experiencia al estado de ánimo del conductor.
Ford también completó recientemente una gira por Noruega – uno de los mercados más avanzados de Europa en materia de vehículos electrificados – con el Mustang Mach-E, ayudando a proporcionar una visión del funcionamiento diario del modelo usando la infraestructura de carga existente.
En condiciones reales, el modelo de batería de autonomía extendida y tracción a las cuatro ruedas con una autonomía de conducción WLTP de 540 km superó las expectativas de eficiencia energética, viajando 484 km sin parar desde Oslo a Trondheim, terminando el viaje con el 14 por ciento de la capacidad restante de la batería.
El Mustang Mach-E tiene como objetivo ofrecer una autonomía de conducción WLTP puramente eléctrica de hasta 610 km en configuración de batería de autonomía extendida y tracción trasera.
Las pruebas más recientes muestran que el tiempo de carga ha mejorado en casi un 30 por ciento con respecto a las estimaciones iniciales, alcanzando un promedio de 119 km de autonomía en 10 minutos utilizando la carga rápida IONITY, cuando está equipado con una batería de autonomía extendida y tracción trasera.
«Si había algo que queríamos lograr a nivel mundial con el Mustang Mach-E, era producir un vehículo eléctrico que mereciera llevar la insignia Mustang», cuenta Van Noyen.