La línea de lujo de Honda, Acura, registró una disminución de ventas del 21,2%. Algo preocupante, para una línea de vehículos que todavía no encontró ni su público, ni su identidad, ni nada.
Sus modelos son Honda disfrazados, muy distinto al trabajo que hace Lexus e Infiniti las divisiones de Toyota y Nissan, donde sus modelos que en algunos casos son casi iguales, mantienen su propia personalidad.
Acura. es una automotriz que está más comprometida a hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes. La automotriz se suicida lentamente, y la causa de la muerte será la falta de innovación.
Las exposiciones de autos existen tanto para pre-visualizar posibles futuros productos y para mostrar nuevas ideas. Es donde los fabricantes de automóviles pueden mostrar nuevos lenguajes de diseño, nuevas tecnologías, nuevos segmentos de mercado que les gustaría explorar y, en general, animar a la gente a preocuparse por su marca.
Acura ha estado incluso fuera de todo eso. Su último concepto realmente interesante, fue el concepto avanzado de autos deportivos del 2007, o últimamente volviendo al NSX, un deportivo que había pasado sin pena ni gloria, y que ahora resurge como el ave fénix, pero más bien para ser cocinada.
Infiniti, otra marca japonesa que a menudo es acosada, está explorando un nuevo territorio con los pequeños crossover, modelos deportivos y SUV;s de lujo, alejándose de su casa matriz Nissan, llevando sus oficinas a Hong Kong.
Volvo, después de años de estar en un estado de coma, está aprovechando sus puntos fuertes trayendo nuevos y seguros modelos al mercado, mostrando un nuevo lenguaje de diseño bien sexy.
Lexus, que quiere hacerse ver con aspecto salvaje y agresivo con la cupé LC-500, no tiene problemas con ningún de sus modelos, ya que son cómodos, seguros y fiables.
BMW tiene a sus extravagantes Serie 5 GTs y serie 4 Gran Turismo, al menos no están sentados y están explorando nichos para llenar. .
Incluso su empresa matriz Honda tiene algunos modelos interesantes de fue cell, aunque todos sabemos que el hidrógeno probablemente no va a pegar.
Uno de los modelos de Acura más aburrido en su línea de los últimos años ha sido el crossover ZDX, y lo mataron porque nadie lo compró.
En estos días, la innovación en Acura parece limitarse a añadir una «X» a los nombres de los modelos existentes y lanzar en la mayor cantidad de faros como sea posible.
Sus cifras de ventas, que constantemente se quedan muy rezagados detrás de Lexus, Infiniti, BMW y Mercedes.
Acura es una marca que necesita desesperadamente algo, para crear algo de ruido y sacudir la industria, ya que la nueva NSX no lo ha conseguido.
Recuerde que Acura fue la primera marca de lujo japonesa creada para luchar contra Mercedes y BMW. Que fue una idea estimulante en la década de 1980, y sus modelos Leyend e Integra cumplieron con esa promesa.
El estancamiento de Acura nunca ha sido más evidente, y no se vislumbran cambios. Ni tampoco se ve el interés en el mercado hispano, muy fiel a Honda, pero no a Acura, que le ha dado la espalda.
Es triste ver como una marca trata de luchar contra la corriente, y si no hacen algún cambio drástico, seguirá el mismo camino que Oldsmobile, Hummer, Pontiac, Plymouth, Mercury, Saturn, ente tantas otras que tiraron la toalla del abandono.