Por Enrique Kogan – Puros Autos
General Motors despedirá a 14,700 trabajadores de varias fábricas y miles de oficinistas en América del Norte, mientras colocará cinco plantas para un posible cierre durante la reestructura para reducir costos y enfocarse más en vehículos autónomos y eléctricos.
Se espera que 6.000 trabajadores de fábricas podrían perder empleos solo en los Estados Unidos Canadá, aunque algunos podrían transferirse a plantas de camiones.
La reducción incluye a llamados 8,100 trabajadores de cuello blanco (oficinistas y con mejores posiciones en la empresa), algunos de los cuales aceptarán retiros anticipados y otros serán despedidos.
La mayoría de las fábricas afectadas construyen autos que no se venderán en los Estados Unidos después del próximo año, y formarán parte de las conversaciones contractuales con el sindicato United Auto Workers el próximo año.
Las fábricas incluyen plantas de ensamblaje en Detroit, Lordstown, Ohio y Oshawa, Ontario. También se verán afectadas las fábricas de transmisión en Warren, Michigan, así como Baltimore.
En el otoño, el fabricante de automóviles de Detroit ofreció retiros anticipados a 18,000 trabajadores de cuello blanco, pero aún no ha dicho cuántos de estos aceptaron.