Ford está retirando más de 2.9 millones de vehículos en los Estados Unidos, por un defecto en el cambio de marchas que se ha relacionado con cuatro informes que alegan una lesión.
El retiro cubre ciertos modelos del Escape del 2013 al 2019, C-Max del 2013 al 2018, Fusion del 2013 al 16, Transit Connect del 2013 al 21 y Edge del 2015 al 2018.
Según un informe de retiro presentado a la NHTSA la semana pasada, esos vehículos podrían tener un buje dañado o faltante que les impida cambiar a la marcha prevista y podría hacer que el vehículo se mueva en una dirección inesperada.
Según el informe, los vehículos afectados podrían salir rodando incluso después de que el conductor ponga el vehículo en «estacionamiento», lo que aumenta el riesgo de un choque o lesiones.
Ford cita en su informe
“Si un vehículo, de los llamados a revision, se apaga en un estado de engranaje de transmisión que no sea ‘estacionamiento’, independientemente de la posición de la palanca de cambios, el motor no se reiniciará”.
Ford le dijo a la NHTSA que también tiene conocimiento de seis informes que alegan daños a la propiedad y 1,630 informes de garantía.