EE.UU. A partir de enero del 2024 será mas fácil comprar un vehículo eléctrico. ¿Por qué?

A partir de enero, y como reembolso en el punto de venta, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió nuevas directrices sobre cómo se puede utilizar un crédito fiscal de 7.500 dólares para vehículos eléctricos.

Actualmente, los consumidores sólo pueden aprovechar el crédito de $7,500 dólares para vehículos eléctricos nuevos o el crédito de $4,000 dólares para vehículos eléctricos usados cuando presenten sus declaraciones de impuestos el año siguiente.

A partir del 1 de enero, los consumidores pueden transferir los créditos a un concesionario de automóviles, lo que efectivamente reduce el precio de compra del vehículo, un cambio que puede ayudar a impulsar las ventas de vehículos eléctricos.

Según la guía emitida el viernes, los consumidores deberán certificar que cumplen con los límites de ingresos para calificar para el crédito fiscal o deberán pagar al gobierno al presentar sus impuestos.

Para vehículos nuevos, el límite de ingreso bruto ajustado es de $300,000 dólares para parejas casadas y de $150,000 dólares para individuos.

El Congreso aprobó una reforma radical de los créditos fiscales para vehículos eléctricos en agosto de 2022 como parte de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) de 430.000 millones de dólares.

Hacienda también está publicando más detalles sobre los requisitos de registro y la mecánica de la transferencia para los concesionarios de automóviles.

Los distribuidores deberán registrarse a través de un nuevo sitio web del IRS para ofrecer los créditos. A partir de enero, los concesionarios pueden presentar las ventas de vehículos al IRS y recibir el pago de los créditos fiscales dentro de las 72 horas.

Según las reglas propuestas publicadas el viernes, las transferencias de crédito y los pagos por adelantado normalmente no afectarían la obligación tributaria de los concesionarios y los pagos de los concesionarios no serían parte del ingreso bruto de un consumidor.

La ley IRA del 2022 requería que los vehículos se ensamblaran en América del Norte para calificar para cualquier crédito fiscal, eliminando casi el 70% de los modelos elegibles en ese momento. El 1 de enero, entraron en vigor nuevos límites de precios para los vehículos eléctricos calificados y límites a los ingresos de los compradores.

En abril, el Tesoro implementó nuevas reglas que establecen el abastecimiento de componentes de baterías y minerales críticos para calificar.

La administración Biden aún debe emitir reglas a finales de este año que detallen lo que constituye una «entidad extranjera de interés» que luego descalificará a los vehículos eléctricos para recibir créditos si tienen componentes de batería o si las baterías contienen minerales críticos de una entidad extranjera de interés.

La Agencia de Protección Ambiental ha propuesto reglas que, según prevé, darán como resultado que el 67% de los vehículos nuevos sean vehículos eléctricos para el 2032.

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