Por Manuel Arroyo
La automotriz alemana está ampliando un retiro, que ya había llamado, para cubrir 1.6 millones de vehículos en todo el mundo debido a posibles fugas de fluidos que podrían provocar un incendio.
BMW dijo que en algunos vehículos diésel, el refrigerante podría derramarse del módulo de recirculación de los gases de escape, parte del sistema de reducción de emisiones. Las fugas podrían combinarse con el hollín a altas temperaturas y provocar un incendio.
La compañía con sede en Múnich ya había decidido retirar 480,000 vehículos en Asia y Europa luego de que se informaron incendios en Corea del Sur. No se reportaron heridos. Un examen posterior condujo a una expansión de la acción de mantenimiento.
Un comunicado de la compañía dijo que se contactaría a los clientes con automóviles afectados. Unos 54.700 vehículos están afectados en los Estados Unidos y Canadá. El retiro cubre algunos vehículos fabricados entre 2010 y 2017.